Sobre nosotros

Hace cinco años que he probado los chocolates ecuatorianos. Una de estas pequeñas coincidencias en mi vida, probablemente la más bonita de todas, es la que me hizo conocer a una ecuatoriana en Suiza, el país del chocolate si los hay… en Europa. Las consecuencias de este encuentro son múltiples, y todas magníficas (¡ahora es mi esposa!). Pero la más golosa es la que me lleva, al menos una vez al año en Navidad, a Quito, la capital ecuatoriana, una ciudad mágica situada en la ladera de un volcán, a casi 3000 m de altitud.

Ecuador es el séptimo país productor de cacao del mundo. Pero su particularidad es ser el principal productor de cacao tipo Fino de Aroma, la variedad de cacao más codiciada. Ecuador es el hábitat único de especies raras de cacao, como el arriba nacional, considerado un tesoro nacional, y el cacao Sacha. Estas especies están detrás del reciente auge de la industria del chocolate fino en Ecuador.

Así que una vez al año tengo la oportunidad de renovar mi suministro de chocolate ecuatoriano, cacao de arriba por favor, y disfrutar de su diversidad. Porque sí, si la especie es la misma, cada región de este magnífico y variado país tiene su sol, su humedad y sus tradiciones. Al igual que el vino o las ostras, las condiciones de cultivo del cacao influyen en su sabor. Del mismo modo, las diferencias en la forma de transformarlo en chocolate dan resultados muy diferentes. Por último, es habitual añadir sabores locales al chocolate, como frutas o hierbas. Esto abre un amplio abanico de posibilidades.

Este sitio pretende ser tanto una guía como un diario para explorar la maravillosa variedad del chocolate ecuatoriano.

Para cada barra, encontrará una descripción y una evaluación calificada. También intento describir la historia y los antecedentes de cada marca. A medida que pruebe nuevos bares, los añadiré a esta guía.